En general las cámaras D-SLR se parecen bastante a sus predecesoras de película. Pero, si nos fijamos bien, veremos que los últimos modelos incluyen muchas sutilezas innovadoras.
EL COLOR DE LAS CÁMARAS.-
Teniendo en cuenta que estamos en el siglo XXI, es un poco raro, que el diseño de cámaras, parezca encontrarse todavía en la época del «Ford T«, a fin de cuentas, el negr no es el color favorito de todo el mundo. El colorido y el diseño tienden a ser más atrevidos en el sector de las cámaras híbridas, pues por ejemplo hay marcas como Olympus, que también tienen modelos disponibles en color rojo y color champán, la marca Panasonic también tiene modelos en color rojo y color azul y la marca Pentax, tiene modelos con la mayor variedad de colores del mercado, nada menos que 12 impresionantes colores que van del marrón chocolate al rosa metalizado. Incluso la marca Canon ha sacado el modelo 1100D en color rojo, pero solamente para la campaña de Navidad.
MODOS DE DISPARO.-
Todas las réflex suelen incluir la gama tradicional de modos automático, programa, prioridad de apertura, prioridad de obturación y manual, que normalmente están disponibles en el dial de modo de la parte superior de la cámara. Los modelos dirigidos a niveles básicos e intermedio como la Canon 450D o la Nikón D3100, también suministran unos modos especiales para retratos, paisajes, deportes y demás (que eliminan la confusión cuando no se tiene experiecia).
PANTALLA LCD.-
Lo corriente en la actualidad son unas pantallas LCD de tres pulgadas grandes y claras, cuyo papel principal no es sólo importante para acceder a los menús, sino para comprobar asimismo la calidad de las fotografías hechas. Las cámaras económicas y las máquinas antiguas o desfasadas en el tiempo, suelen traer unos paneles de baja resolucion, con tan solo 230.000 píxeles, mientras que los modelos más recientes como la Canon EOS 60D o la Nikon D90, ofrecen 1.040.000 y 920.000 píxeles respectivamente.
MECANISMO RÉFLEX.-
La principal diferencia entre las cámaras D-SLR y las compactas o híbridas, radica en que las primeras poseen un espejo que dirige la imagen captada por la lente al visor óptico, con lo cual, permite comprobar con absoluta claridad los efectos del enfoque y el zoom. El propio visor tiende a ser más sofisticado en las cámaras de gama alta y el funcionamiento réflex del espejo, que se invierte al tomar la fotografía para redirigir la luz al obturador y el sensor situado detrás, es por lo general también más silencioso.
ENFOQUE AUTOMÁTICO.-
Un mayor número número de puntos de enfoque automático, permitirá seleccionar el que coincida exactament con el principal punto de enfoque de una escena (como por ejemplo los ojos en un retrato), y también es posible usar varios puntos de enfoque para seguir un objeto en movimiento en el modo de enfoque automático continuo. Las cámaras de gama baja o media suelen ofrecer nuevo u once puntos de enfoque y las cámaras de gama alta, un número superior (por ejemplo la Nikon D300S proporciona nada menos que 51 puntos de enfoque).
SENSIBIIDAD ISO.-
Éste es un aspecto de las cámaras réflex que ha mejorado mucho durante los últimos años, pues unos valores ISO máximos superiores, posibilitan unas velocidades de obturación más rápidas al trabajar con poca luz. Aumentar el valor ISO, hace que el sensor sea más sensible y que la cámara pueda realizar fotografías en lugares más oscuros o con menos luz, sin tener que usar obturaciones largas. Las cámaras de gama baja y los diseños antiguos, suelen ofrecer un máximo de 1600 ISO, mientras que los modelo nuevos nos pueden proporcionar unos valores máximos en torno a los 6400 ISO en su gama normal, con opciones apliadas de hasta 12800 ISO. Las cámaras réflex profesionales aumentan este valor hasta los 102.000 ISO. Por lo tanto, las mejoras en el diseño de los sensores y en los sistemas de procesamiento de imagen, son las que premiten unas opciones ISO más altas, sin apenas ruido.