Configuración de Tu Cámara y Puesta a Punto
BALANCE DE BLANCOS
Seguro que ya viste en los menús de tu cámara, el famoso «Balance de Blancos«, o lo que es lo mismo el «Equilibrio de Color» (White Balance – WB), que no es más que el control de dominantes cromáticas en nuestras fotos.
Aplicar un ajuste de «WB» en nuestra cámara, altera los colores de la fotografía y consigue además que todos los tonos grises, queden neutros, o lo que es lo mismo, que queden sin dominante alguna de color en ellos, por eso, aunque muchos fotógrafos piensen o descarten esta opción de modificar nuestro «WB» como si fuera solamente para principiantes, es un error muy frecuente el no hacerlo.
Los modos de utilizar el «WB» son:
- El Automático
- Los preajustes
- El WB manual basado en la temperatura de color
- La lectura manual sobre un blanco.
En general suelen venir indicados por unos iconos como estos:
Opciones Típicas de Balance de Blancos
Dependiendo de cual utilicemos, conseguiremos unos resultados más pobres o menos acertados según la complejidad de los mismos.
Imagen 01
Imagen 02
Con el ajuste MANUAL del Equilibrio de color «WB» podemos determinar la «Temperatura de color» en nuestras tomas, siempre en el modo de Grados Kelvin.
Imagen 03
Imagen 04
Y como no siempre vamos a poder contar con la ayuda de un buen colorímetro para poder corregir esas dominantes de color que pudieran aparecer en nuestras fotos, afortunadamente cada vez son más las cámaras que cuentan con una opción de ajuste de valores «Mired«.
Imagen 05
Y finalmente llegamos al MODO DE LECTURA MANUAL EN BLANCO, que sin lugar a dudas es el más preciso, aunque evidentemente lleva su fase de ajustes más detallados. En los modelos Nikon se llama «PRE«.
Imagen 06
En el caso de la Nikon D300 se hace de la siguiente manera:
- Utilizando el botón «WB» y el dial giratorio de la parte trasera, cambiamos al modo «PRE» Preajuste manual.
Imagen 07
- Mientras tenemos pulsado ese botón «WB» durante unos segundos, el indicador «WB» parpadeará en nuestra pantalla LCD superior.
Imagen 08
- Encuadramos ahora la superficie de blanco hasta llenar el área completa de nuestra toma.
- Realizamos una fotografía, teniendo en cuenta que no quede sobreexpuesta.
- En ese momento, y si todo está correcto nos aparecerá en la pantalla LCD el mensaje «Good» (bien), sino viéramos dicho mensaje, nos aparecerá este otro «no Gd«, que indica que no ha sido correcta la toma, debiendo repetir el proceso.
Imagen 09
- Si todo es correcto nos aparece esta pantalla en la cual deberíamos ver la foto que hemos realizado y que podremos guardar con el nombre que queramos en nuestra Nikon (en este caso sería «d-0«, pudiendo tener más de una fotografía tomada para diferentes modos de temperatura de color personalizados y renombrados con el nombre que queramos), y que será la foto que esté activa cuando utilicemos el ajuste «PRE» de nuestra cámara.
Imagen 10
Yo en mi caso no había realizado este procedimiento nunca con mi cámara, y por lo tanto no me aparece foto en blanco alguna.
Imagen 11
Un saludo
PD: Os pido disculpas por la calidad de las últimas fotografías, que como podéis haceros una idea no son de mi cámara, sino sacadas de un Libro maravilloso de Hugo Rodríguez «Captura Digital y Revelado de RAW» que os recomiendo encarecidamente y de donde están sacados los contenidos de todas las entradas relacionadas con la configuración de una cámara Nikon D300
Fuente: Hugo Rodríguez
Voy a tener que sentarme a probar sin dudas…. esto del balance de blancos es algo que está en Auto y nunca le preste atención, pero evidentemente si quiero progresar hay que ponerse manos a la obra, disparar y probar.

Gracias Juan por el post.
Un abrazo
Así es Carlos. El tema del «Balance de Blancos» el famoso y hasta a veces temido WB, o mejor traducido y más acertado «Equilibrio de Color«, es algo que no se tiene demasiado en cuenta a la hora de hacer una fotografía y por lo tanto a la hora de trastearlo, verlo, probarlo, etc…., ya que las cámaras de hoy en día trabajan realmente bien y de forma magistral con ese ajuste en automático, eso no hay que dudarlo, pero si se le presta un poco más de atención a este elemento, y se quieren sacar absolutamente detalladas y equilibradas nuestras tomas, sería muy, pero que muy aconsejable saber donde nos podemos mover con él.
No en vano, es como saber que tipo de luz es la que tenemos en un momento determinado y saber cuanto grados Kelvin tenemos en ese instante para aumentar o reducir los mismos a nuestro gusto, algo que EL MAESTRO lo hace a la perfección y que utiliza o varía incluso muchas veces esos mismos valores, obteniendo así fotografías totalmente distintas a las que en ese momento, y con nuestra cámara perfectamente calibrada realizaríamos. Obteniendo así fotos con un clima más cálido, más frío, etc…..en definitiva distintas.
Como ves Carlos, cada maestrillo tiene su librillo y no es algo que sea obligatorio hacerlo, ni tan siquiera diría que fuera necesario para sacar una buena foto, una gran foto. Pero no está demás el saber que eso está ahí, para qué sirve, y que lo podemos utilizar y usar a nuestro gusto cuando nos convenga.
Un abrazo Hermano
