Si partimos de la base inapelable e incuestionable, que el fotógrafo se hace y no se nace, estaría un poco faltando a la verdad, ya que de todos es sabido, que hay personas que con el mejor material fotográfico del mundo, clases y clases de fotografía, manuales, libros, tutoriales, etc… nunca serán o llegarán a convertirán en fotógrafos profesionales o de cierto prestigio (igual tampoco ese es su fin, aunque si tiene ese material y realiza infinidad de cursos, se compra los mejores libros sobre fotografía, dudo mucho que no quiera serlo); y sin embargo hay otras personas que con una cámara normalita, compacta, ni tan siquiera Réflex, pequeñita, cuanto más mejor, para así poder llevarla siempre en el bolsillo de la chaqueta, pantalón, cazadora, riñonera, bandolera, etc…. sin realizar cursos ni estudiar ningún libro sobre el tema, realizan unas fotografías maravillosas, ya no solamente por su nitidez, sino más bien, por la composición, punto de enfoque,….

Estas últimas personas, cuentan con un ojo fotográfico innato, natural, yo diría incluso que especial, un ojo para realizar fotografías que ya quisiéramos muchos. Pero como esto es también evidente, a los dos, más al uno que el otro, les vendría bien tener claros algunos conceptos y puntos de vista, que de alguna forma les haría mejorar y depurar su técnica e incluso centrarse en el estilo personal que más le agrade.

 

Aprender a ser Fotógrafo

Dicho esto, queda claro que todos los que amamos este arte quisiéramos encontrar la clave del éxito rápido, lamentablemente esto no existe, así que solo nos queda armarnos de paciencia y tomarnos con la mayor seriedad posible este «Trabajo» para alguno y «Afición o Hobbit» fantástico para otros y que no es más que es registrar la vida diaria en imágenes fotográficas.

Vamos a ver una seria de claves que pueden ayudarnos a convertirnos en fotógrafos o incluso en mejores fotógrafos:


1.- FORMACIÓN

Si bien es cierto que hay quienes nacen con una aptitud especial para las artes, la fotografía tiene además un aspecto técnico muy importante, al que hay que prestar especial atención para aprender a dominar las posibilidades que nos brinda la disciplina fotográfica, por lo tanto, debemos estudiar, ya sea de manera autodidacta, asistiendo a cursos específicos o por qué no, cursando la carrera universitaria. Las ventajas de realizar un curso son las prácticas obligadas y el ritmo de aprendizaje al que nos vamos acostumbrando.


2.- EQUIPO

Si bien es cierto que hay fotos increíbles registradas con equipos muy básicos, también es una realidad que un buen equipo te permitirá una más amplia gama de fotografías y que, generalmente, los equipos de mayor nivel también te brindan una mejor imagen y cuentan con características que te permiten realizar tomas que con una cámara compacta nunca podrías lograr. Invierte en un equipo mejor, puedes comenzar perfectamente bien invirtiendo en una cámara réflex digital.


3.- MIRAR

Mucho se ha hablado del ojo fotográfico, siempre se dice que la cámara es solamente una herramienta pero que el verdadero artífice de una fotografía es el fotógrafo y la calidad de esta dependerá en un nivel muy alto del buen ojo fotográfico que este posea. Eso es cierto, pero, ¿cómo se hace para tener un buen ojo fotográfico?

Muy sencillo, ADIESTRÁNDOLO. Y eso se logra viendo el trabajo de otros fotógrafos, sobre todo de aquellos que se han consagrado y han alcanzado grados de excelencia que nosotros buscamos. Mirando se aprende a ver, y para realizar una buena toma fotográfica primero debemos ver el mundo a través de la mirada de un fotógrafo.

Comienza a probar con estos consejos y verás como todo tu mundo como fotógrafo puede cambiar con solo comenzar a hacer las cosas con una guía clara y efectiva. Cuanta más fotografía miremos, mejores serán nuestros resultados.


4.- EXPERIMENTAR

La fotografía es un arte que crece y se perfecciona con el tiempo y el trabajo, cuantas más fotografías tomes mejores imágenes lograrás. Por mucho conocimiento teórico que tengas hasta que no tomes tu cámara fotográfica y salgas al mundo a disparar no habrás alcanzado ni una décima de experiencia. El secreto está en no cansarnos nunca de mirar, experimentar, probar y volver a comenzar, todo el tiempo, sin cesar.

Aún cuando hayamos comprendido y asimilado los conceptos básicos y fundamentales de la fotografía, la gran variedad de situaciones que nos ofrecen los distintos escenarios (pensemos en lo mucho que cambia la imagen de un sitio con el correr de las horas del día y los cambios de luz) nos obliga a experimentar para comprobar qué resultados obtendremos de cada toma. Es fructífero hacer una rutina de la experimentación. Nunca dejamos de aprender


5.- CRECER

El crecimiento del fotógrafo en su oficio es un crecimiento que se da paralelo al crecimiento en edad, en experiencia de vida. Nuestra visión va cambiando y madurando con el paso de los años, eso nos ayudará a alcanzar una maduración también en nuestro trabajo. Las experiencias vitales nos ayudarán a crecer como fotógrafos y como personas.