Como hacer una foto de la luna sin morir en el intento, la cosa no es tan difícil y se trata de probar hasta conseguir lo que deseamos.

[nggallery id=21]


1. Elige bien la hora

Para hacer fotos a la Luna no se necesita una hora especial; tan solo que la Luna esté visible.

Puede parecer que la luna tiene un tamaño mayor cuando se encuentra próxima al horizonte pero, como bien se apunta en los comentarios más abajo, es solo un efecto óptico el que la Luna se vea más grande; si haces la prueba comprobaras que, independientemente del momento que elijas para hacer la foto, la Luna se verá del mismo tamaño.

Además, el hecho de que el cielo salga completamente negro le da un atractivo adicional a la foto, para mi gusto.

No obstante, puedes hacer las fotos en cualquier momento. Simplemente, si la Luna está más alta se verá algo más pequeña.


2. Utiliza la medición puntual

Si tu cámara lo permite, utiliza el modo de medición puntual de la luz. Las fotos de la Luna son uno de esos casos en los que viene muy bien disponer de este modo de disparo, ya que la medición matricial o promediada que suelen tener seleccionadas las cámaras por defecto engañarán a la cámara y probablemente la Luna salga quemada.

Al estar el cielo muy oscuro, el medidor de la luz promedia y la luna puede salir como una masa blanca uniforme, perdiendo cualquier detalle de su superficie.

Si tu cámara no permite utilizar la medición puntual, no desesperes; puedes utilizar otros modos de medición. Simplemente tendrás que realizar alguna que otra prueba hasta conseguir buenos resultados. Prueba a ajustar la exposición (baja el EV) para que la cámara subexponga. Con ello evitarás quemar la Luna.

3. Revisa el histograma
La mejor manera de comprobar que la foto está correctamente es revisar el histograma después de disparar.

Analiza el histograma y asegúrate de que las luces no quedan reventadas (la parte derecha del gráfico).

Si tu cámara dispone de un modo de consulta en el que las zonas quemadas de la foto parpadean, te resultará muy útil para comprobar si alguna parte de la foto se ha quemado.


4. Elige la Mayor Distancia Focal que Puedas
Haz zoom al máximo con tu cámara. Cuanto mayor sea la distancia focal, más grande saldrá la luna.
Bastante pequeña se ve a simple vista la Luna como para que la hagamos más pequeña aún utilizando focales cortas.
5. Enfoca al infinito
La Luna está muuuy lejos. Fuerza el enfoque de la cámara para que ésta enfoque al infinito.
Si la cámara lo permite, coloca el modo de enfoque en posición manual para que quede fijado al infinito.
Si no tienes la opción de enfoque manual o no sabes como utilizarla, intenta enfocar con la cámara en modo automático.Es probable que al hacerlo el sistema de enfoque de la cámara se vuelva loco y no consigua enfocar. Busca entonces algo que esté lo suficientemente lejos, enfócalo, y manteniendo el punto de enfoque apunta a la Luna y dispara con tu cámara.
6. Usa una velocidad de disparo lo suficientemente rápida
Como la luna está tan lejos, por mucho que lo hayamos estudiado de pequeños se nos olvida que la Luna está en movimiento. Gira lentamente alrededor de la Tierra. Pero no tan lentamente como para que la Luna no salga movida si no tenemos cuidado.

Una velocidad de 1/160 debería ser suficiente como para que no salga movida. A partir de ahí, si utilizamos una focal muy larga, tendremos que utilizar una velocidad aún más rápida para que la foto no salga trepidada por nuestro propio pulso.

Espero que tengan la suerte de obtener una como la de la imagen que siguiendo este tutorial pude tomar yo mismo, no tiene ningún tipo de retoque (está tal cual salió de la réflex)  y de la cual estoy muy conforme por ser solo un aficionado.