3.- LO IMPORTANTE ES EL SISTEMA
Las cámaras réflex también se conocen como «cámaras de sistema» porque el cuerpo actúa como centro de un sistema ampliable que incluye objetivos, flashes externos, controles remotos y demás. La calidad del sistema de un fabricante debe analizarse de forma general, en vez de dejarse deslumbrar por las características específicas de un cuerpo concreto.


Conjuntos Canon


Objetivos
La auténtica versatilidad de las cámaras D-SLR procede de la posibilidad de cambiar el objetivo en pocos segundos para usar desde grandes angulares y ojos de pez a ingentes teleobjetivos zoom, con alcances verdaderamente telescópicos. Pero, al mismo tiempo, a la hora de elegir el tipo de cámara, es fundamental examinar los objetivos disponibles en función del tipo de fotografía que más te guste. Canon y Nikon ofrecen las mayores gamas, pero sus precios pueden variar mucho. Por ejemplo, un Canon EF-S 17-55 mm f/2.8 IS USM cuesta en torno a 840 euros, mientras el Olympus 14-35 mm f/2.0 Cuatro Tercios se sitúa alrededor de 2.300 euros.

Accesorios de otras marcas
Siempre es posible ahorrar dinero sacrificando un poco de calidad y escogiendo objetivos y accesorios de otros fabricantes. En lo tocante a objetivos, Sigma, Tamron y Tokina fabrican todos ellos alternativas de buena calidad a las lentes originales. Pero, como de nuevo algunos de sus modelos más destacados sólo están disponibles para monturas Canon y Nikon, también vale la pena comprobar la disponibilidad de objetivos concretos que podrían interesarte en un futuro.

Flashes
Las cámaras D-SLR acostumbran a llevar integrado un flash, pero éste no puede compararse con los flashes externos de potencia muy superior. Los buenos modelos, también incluyen cabezales descentrables para suavizar la calidad de la luz, haciéndola rebotar en techos y paredes, y cabezales motorizados capaces de ampliar el alcance del flash al usar longitudes focales más largas. Algunos modelos permiten zoom automático del flash y una precisa medición TTL para lograr exposiciones correctas. Todos los fabricantes de cámaras réflex ofrecen sus propios flashes, pero al igual que con los objetivos, a menudo hay alternativas más baratas de marcas como Metz, Nissin, Sigma y Sunpak. Algunos de los mejores de estos modelos, como el Nissin Di866 Professional, sólo se venden en versiones para Canon o Nikon.

Conexiones
Algunas de las prestaciones del «sistema«, van más allá de la cámara de una forma muy digital. Por ejemplo, aunque los enchufes para conectar un control remoto y evitar el movimiento no son nada nuevo, entre las recientes conexiones figuran desde terminales USB para descargar fotos a zócalos de audio y vídeo, y en los últimos modelos incluso entradas HDMI para ver las fotos en televisores de alta definición. De hecho, esta última opción es cada vez más importante si se tiene en cuenta que muchas réflex también son capaces de grabar vídeo HD. Por cierto, de cara al vídeo, será necesario un conector de micrófono externo.